La importancia del embalaje en importación y exportación

El óptimo estado de la mercancía, hasta que llega a su destino final, resulta trascendental en las operaciones de importación y exportación de productos. El hecho de alcanzar la excelencia en la manipulación y el transporte de los artículos reafirma la importancia del embalaje, aspecto clave para potenciar los beneficios y minimizar los problemas que pudiesen surgir. Así, el asesoramiento y la labor de una empresa transitaria cobra máximo sentido con el fin de planificar y perfeccionar las transacciones.   

Mercancía en perfecto estado 

La satisfacción de las operaciones de importación y/o exportación de los productos estará íntimamente relacionada con el estado en el que se encuentre la mercancía al llegar a su destino final, es decir con el embalaje de la mercancía. La maniobra y la movilidad a las que están expuestos los artículos durante su transporte son muy elevadas, por lo que un embalaje óptimo garantizará una protección adecuada. 

Las características del producto condicionarán el proceso de empaquetado. En primer lugar, la elección de las cajas resulta fundamental, con una adecuación en tamaño y peso al producto. El relleno de los espacios vacíos del contenedor elegido, con el uso de materiales acolchados, sirve para inmovilizar y proteger la mercancía. Para concluir, el empleo de cinta adhesiva resistente a factores externos y un etiquetado correcto que sirva para saber rápidamente el tipo de artículo. Es decir, que el objetivo general y principal se base en asegurar la calidad de los productos a transportar.

El embalaje como herramienta de marketing

Otro de los beneficios que se puede extraer del embalaje se relaciona con el marketing de las empresas. Las estrategias para generar marca e identidad por parte de las compañías son cada vez más variadas, ya que la fuerte competencia obliga a usar cualquier instrumento para posicionarse en el sector. Y, en esta línea, se han ido desarrollando diferentes tipos de embalajes, jugando con los materiales, el diseño y las formas de estos. Es decir, implica un proceso de reflexión y desarrollo estratégico para planificar un embalaje que, además de cumplir sus objetivos de protección del producto, sirva para crear identificación con la marca.  

De este modo, las empresas buscan dar calidad y transmitir atención cuidadosa y personalizada a fin de fidelizar a los clientes tradicionales. Y, de la misma manera, tratar de promocionarse buscando la sorpresa y la atracción de los clientes potenciales, esos que en un futuro próximo puedan convertirse en consumidores habituales. Por ejemplo, que el logotipo o eslogan forme parte del embalaje se convierte en una estrategia habitual para ampliar la notoriedad seduciendo al cliente. En definitiva, que la experiencia del cliente sea gratificante y su feedback genere emociones positivas hacia la empresa en cuestión.  

La baja calidad puede generar costes añadidos

Otro punto que resalta la importancia del embalaje está relacionado con el coste del mismo.La elección del tipo de embalaje también tiene una incidencia significativa en los costes de la empresa. Como casi para cualquier decisión de compra, se trata de una fase de valoración de la calidad (en este caso del empaquetado) y, paralelamente con el mismo nivel de importancia, el desembolso económico que supone esa adquisición. En este sentido, lo que aparentemente puede parecer un ahorro de costes adquiriendo un embalaje más barato, puede convertirse posteriormente en costes añadidos.

La calidad de los embalajes de mercancías, como es obvio, va a afectar al transporte de las diferentes mercancías. Por lo tanto, el uso de embalajes baratos y de baja calidad, como hemos visto anteriormente, acerca a un posible deterioro de los productos y, directamente relacionado, a que la empresa tuviese que hacer frente a reembolsos y devoluciones de los artículos. Además, ese teórico ahorro puede transformarse en gasto posterior a la hora de transportar la mercancía por cuestiones de peso y tamaño de las remesas. Así, habrá que ser cauteloso para la elección del embalaje a fin de evitar gastos añadidos posteriores. 

No cuidar el medio ambiente afecta a la experiencia del cliente 

El desarrollo sostenible se postula como uno de los temas a tener muy en cuenta, ya que la concienciación de la población es cada vez más elevada. Además, la normativa legal exige filtros y se ajusta más hacia este tipo de prácticas. El derroche de envases con un volumen excesivo e inutilizado y el uso de materiales no sostenibles, que contaminen y sean difíciles de reutilizar y reciclar, se posicionan como prácticas que crearán connotaciones negativas en el cliente hacia el proceso de importación y exportación de PYMES.   

Ventajas de una empresa transitaria 

La optimización de las transacciones comerciales resulta mucho más fácil con el asesoramiento de una empresa transitaria. En Kanvel Logistics & Business Worldwide les ayudamos para encontrar la opción personalizada que más ventajas ocasione. De esta manera, las mercancías permanecerán en perfectas condiciones ofreciendo unas prestaciones de alta calidad en su transporte. 

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